El Mundo De Tete
lunes, octubre 08, 2007
domingo, septiembre 30, 2007
La paradoja de nuestro tiempo
La paradoja de nuestro tiempo
es que tenemos edificios más altos
pero temperamentos cortos,
autopistas más anchas
pero puntos de vista más estrechos.
Gastamos más pero tenemos menos,
compramos más pero disfrutamos menos.
Tenemos casas más grandes
pero familias más pequeñas.
Más compromisos
pero menos tiempo.
Tenemos más títulos
pero menos sentido común,
más conocimiento pero menos criterio,
más expertos pero más problemas,
más medicinas y menos salud.
Hemos multiplicado nuestras posesiones,
pero hemos reducido nuestros valores.
Hablamos mucho, amamos poco,
odiamos demasiado…
Aprendimos a amar una vida
pero no a vivirla plenamente.
Hemos llegado a la luna y regresado
tenemos problemas a la hora de cruzar la calle
y conocer a nuestro vecino…
Hemos conquistado el espacio exterior
pero no el interior,
limpiamos el aire
pero contaminamos nuestras almas.
Tenemos mayores ingresos,
pero menos moral,
Hemos aumentado la cantidad,
pero no la calidad.
Estos son tiempos de personas más altas
con caracteres más débiles,
con más libertad pero menos alegría,
con más comida, con mucha mas comida pero menos nutrición.
Son días en los que llegan dos sueldos a casa
pero aumentan los divorcios,
son tiempos de casas más lindas pero hogares rotos,
Un tiempo con demasiado en la vidriera
y poco de puertas adentro.
miércoles, septiembre 26, 2007
¿Por qué nosotros mismos como sociedad le vamos poniendo barreras a nuestros sentimientos?
¿Por qué se castiga el sentir o expresar lo que sentimos?¿Por qué tantos prejuicios?
¿Por qué los sentimientos han pasado a 2do plano y hoy es más fácil ocupar la tecnología para decir las cosas, para hablar con la gente, para expresarles nuestro cariño?
Lo dije cuando di inicio a este blog hace casi 3 años, y lo vuelvo a decir, pero en otro plano. Detesto que el mundo se haya olvidado de lo que significa sentir; de lo que significa vivir, y todo en parte por prejuicios.
Antes sentía que la inercia de frialdad e individualismo del mundo me había arrastrado, y me di cuenta que era un ser incapaz de decir un "te quiero", de sonreir sinceramente o de emocionarme con las bellezas de la vida. Pero en este tiempo he aprendido a vivir sintiendo, a disfrutar cada instante, sin importar el giro de las cosas, sino sólo permitiendo a las emociones ingresar en mi vida, y me di cuenta que vivir sin sentir no es vivir, ya que para vivir hay que estar dispuesto a jugársela, a sentir cosas que nos pueden hacer muy felices, como también no tanto. Me he dado cuenta que hay que vivir involucrándose con la vida, el mundo, y las cosas que eso trae.
AHAHAHHA día raro! ¿por qué toy diciendo esto? ¿por qué tantos "porqués"?
Curioso...
miércoles, septiembre 19, 2007
Aquello
martes, agosto 21, 2007
Instantes
Un instante en que vives sin sentir,
en que escuchas sin querer oir.
Un momento con tu mente en blanco,
lo que viene ya lo sabes de inmediato.
Una paloma que vuela, una hoja que cae.
Una flor se seca, dos corazones que laten.
Tan sólo un pequeño instante piensa el solitario andante.
Tal vez toda una eternidad cuando se ama en soledad.
viernes, abril 13, 2007
Eclipse
Y ella la piel morena tiene.
Todo un chico educado
Ella hija de un simple esclavo.
Tan distintos como Sol y Luna
Este amor es una locura.
Pero el amor no sabe de clases
Ni le importa donde naces.
Frente a sus ojos son sólo hombre y mujer
Que se han unido por un sincero querer.
Cuando están juntos desaparecen sus diferencias
Que la sociedad castiga sin clemencia.
Sus encuentros secretos son cada noche en el río
Nadie puede saberlo, siempre escondidos.
Pero cada vez que sus labios se besan
La magia actúa y son iguales frente a la naturaleza.
Son sólo dos seres que se aman
Distintos en cuerpo, pero unidos en alma.
Un eclipse que raramente ocurre
Un amor que es difícil que perdure.
miércoles, marzo 21, 2007
Una taza de té
El cielo se nubla y pequeñas gotas empiezan a caer, para ir haciéndose más intensas. Mamá mira con preocupación el cielo y sólo le pide a Dios por mi hermano, quien desde la semana pasada trabaja recolectando cartones por las calles. Hace frío, y mamá prepara un té, se siente amargo. Con la taza en la mano, me asomo a la puerta y veo niños, sólo un poco menor que yo, corriendo a sus casas, con sus piesecitos embarrados y enteros mojados. Respiro profundo y soplo el vapor de mi té, pienso que mañana estaré en las calles, juntando cartón con mi hermano, pienso también que el mes entrante mamá tendrá azúcar para su té y harina para las sopaipillas que tanto nos gustan con mi hermano. Dejo la taza sobre la mesa y me recuesto en mi cama, escuchando las gotas de lluvia caer y sintiendo la humedad de nuestro cuarto por todas partes. Intento dormir y tener un hermoso sueño, añorando que al despertar todo sea diferente...